Es un raro padecimiento oncológico cutáneo que aparece en las glándulas sebáceas, normalmente en los párpados, aunque puede manifestarse en cualquier área corporal.
El inicio del carcinoma sebáceo suele ser la formación de un abultamiento que no provoca dolor o un cambio en la textura de la piel haciéndola rugosa y áspera, donde puede formarse una llaga abierta que sangra, promoviendo el surgimiento de una costra.
El carcinoma sebáceo es un tipo de cáncer agresivo que se desarrolla con rapidez y tiene alto riesgo metastásico, siendo también proclive a la recurrencia.
Su ubicación más frecuente, que implica más del 80% de los casos, es el párpado, una zona rica en glándulas sebáceas, donde se encuentran:
- Folículos pilosos.
- Glándulas de Zeiss.
- Glándulas de Meibomio.
Por su alta agresividad, resulta determinante recibir un diagnóstico y tratamiento tempranos para extirpar quirúrgicamente la tumoración antes de que haga metástasis.