¿Qué es Fibrilación auricular?

Se trata de una anomalía de gravedad en la que se gesta una aceleración de la frecuencia cardiaca y las aurículas del corazón laten descontroladamente de manera irregular, obstaculizando la respiración, por lo que, de no diagnosticarse y tratarse a tiempo, puede provocar la formación de coágulos sanguíneos que pueden viajar del corazón al cerebro y ocasionar un ictus (accidente cerebrovascular), insuficiencia cardiaca o un infarto, todas ellas, anomalías potencialmente mortales.

La fibrilación auricular puede ser idiopática y surgir inesperadamente, pero por lo general se debe a lo siguiente:

• Trastornos del sueño como apnea.
• Diabetes.
• Enfermedades cardiacas prexistentes, incluidas las congénitas.
• Estrés.
• Abuso de estimulantes.
• Tabaquismo, alcoholismo y drogadicción.
• Hipertiroidismo.
• Desórdenes metabólicos.
• Infecciones virales.
• Obesidad.
• Padecimientos pulmonares.
• Hipertensión arterial.
• Predisposición genética.
• Sedentarismo.

Existen varios tipos de fibrilación auricular según la duración de los episodios, entre ellos:

• Intermitente: los síntomas surgen y desaparecen, pueden durar unos minutos, horas o semanas.
• Duradera: la alteración del ritmo cardiaco no cesa por sí sola, sino que es necesario corregirlo con tratamiento médico y farmacológico.
• Duradera de largo plazo:la sintomatología se presenta durante más de un año.
• Permanente: no es posible restablecer el ritmo cardiaco normal, por lo que se requieren fármacos para controlarlo y evitar la formación de coágulos.

A pesar de que algunas personas pueden no presentar signos de fibrilación auricular, la sintomatología característica consiste en:

• Cansancio extremo.
• Debilidad.
• Aturdimiento.
• Incapacidad para respirar normalmente.
• Dolor y presión en el pecho.
• Latidos cardiacos rápidos e irregulares.
• Mareos.
• Disminución de capacidad física.

Si la fibrilación auricular no se trata y controla a tiempo puede debilitar el corazón y generar insuficiencia cardiaca. Por lo que si presentas estos síntomas, es importante que acudas de inmediato con un cardiólogo para que te diagnostique y trate oportunamente y evites complicaciones que pongan en riesgo tu salud.

Una vez que el médico analice tu sintomatología e historial clínico, te hará una revisión física y te solicitará diversas pruebas para poder diagnosticar adecuadamente, como:

• Electrocardiograma.
• Ecocardiograma.
• Monitor Holter.
• Pruebas de esfuerzo.
• Radiografías.
• Estudios de sangre.

Una vez que se haya identificado el origen de tu fibrilación auricular, tu médico definirá el tratamiento más adecuado para ti con base en tus síntomas, su intensidad y el tiempo que llevas con ellos. El objetivo principal consiste en restablecer la frecuencia cardiaca e impedir la formación de coágulos, ya sea con la ingesta de fármacos, descargas eléctricas con un desfibrilador, la colocación de catéteres y en casos más extremos, procedimientos quirúrgicos.

En el Centro Cardiovascular te ofrecemos una amplia gama de servicios de prevención, diagnóstico, tratamiento oportuno y seguimiento para cuidarte mediante un modelo de atención integral y multidisciplinario. Acércate a nosotros, queremos escuchar tu corazón.

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