Una vez que tu médico analice tu sintomatología e historial clínico, te realizará una revisión física, en la que pondrá especial atención a tu cuello para verificar si hay abultamientos que indiquen la presencia de nódulos.
Asimismo, te solicitará estudios como análisis de sangre para evaluar la función tiroidea, ecografía, gammagrafía y biopsia por aspiración para descartar la presencia de cáncer.
El tratamiento a seguir será determinado por la naturaleza de los nódulos que presentes, por lo que si se trata de nódulos benignos, será necesario esperar y vigilar su evolución, siendo recomendable la terapia con hormona tiroidea si provocan hipotiroidismo, o en caso de que crezcan y ocasionen problemas, deberán ser extirpados quirúrgicamente.
Cuando los nódulos ocasionan hipertiroidismo, será necesario ingerir medicamentos antitiroideos o recibir terapia de yodo radioactivo, aunque si estos tratamientos no surten efecto o no eres candidato a ellos, la opción es una cirugía para extraer los nódulos.
Si se trata de nódulos cancerosos, la única opción es la cirugía para extirparlos, o en casos más graves, practicar una tiroidectomía total, es decir, la remoción completa de la glándula tiroides.
En el Departamento de Medicina Interna del Centro Médico ABC te brindamos servicios de atención médica con la más alta calidad y seguridad, desde la prevención, diagnóstico, tratamiento oportuno y seguimiento de patologías infecciosas, respiratorias, endocrinológicas, dermatológicas, reumáticas, nefrológicas, gastrointestinales, y hematológicas, tanto de padecimientos crónico-degenerativos como de cuadros agudos, mediante un modelo integral y multidisciplinario.
