Se trata de un padecimiento de naturaleza crónica en el que los lípidos se acumulan de manera excesiva en el organismo, lo que puede desencadenar una serie de complicaciones y comorbilidades que afectan gravemente la salud.
Según cifras oficiales de la Organización Mundial de la Salud (OMS), a partir de 1975 hay tres veces más pacientes obesos a nivel mundial sin distinción de sexo, raza, edad o condición social.
El peso corporal es el resultado de la suma de la masa muscular, los huesos, la grasa y el agua en el cuerpo. Cuando el tejido adiposo es demasiado, el peso aumenta y la salud comienza a deteriorarse.
Cuando se pierde el equilibrio entre el peso y la estatura de una persona, se considera como un caso de obesidad.
La causa principal de la obesidad es la ingesta de un mayor número de calorías con respecto a las calorías que se queman con la actividad física. Ese excedente calórico se transforma en grasa formando depósitos en el cuerpo. Sin embargo, existen otras razones, como:
- Metabólicas: desequilibrios en el organismo que promueven el desarrollo de la obesidad.
- Sedentarismo: la falta de actividad física no permite el desgaste energético con la consecuente acumulación de grasa en el cuerpo.
- Genética: antecedentes familiares de obesidad.
- Hábitos alimentarios: consumir grandes cantidades de grasas, azúcares, carbohidratos y alimentos procesados.
- Edad: con el paso de los años la masa muscular se va perdiendo y el metabolismo se vuelve más lento, provocando una mayor acumulación de grasa.
- Padecimientos hormonales: al haber descompesaciones hormonales, como sucede con el hipotiroidismo, se genera un aumento de peso.
- Embarazo: a pesar de que es normal subir de peso durante el embarazo, también debería serlo volver al peso anterior al terminar esta etapa, pero en muchos casos no sucede así y las madres se convierten en obesas crónicas.
- Menopausia: al presentarse cambios hormonales, las mujeres tienden a subir de peso.
En los adultos el sobrepeso y la obesidad se determina con el índice de masa corporal (IMC), un indicador creado para medir el equilibrio entre el peso y la estatura con el fin de ver si existe equilibrio entre ambos.
La OMS establece los parámetros del sobrepeso y la obesidad con los siguientes valores:
- Sobrepeso: IMC igual a 25 o superior.
- Obesidad: IMC igual a 30 o superior.
En el caso de los niños, se considera la edad para definir sobrepeso u obesidad.
Tener un elevado índice de masa corporal puede desencadenar padecimientos serios, como:
- Ictus.
- Patologías cardiovasculares.
- Cáncer.
- Diabetes tipo 2.
- Edema.
- Problemas respiratorios.
- Disfunciones sexuales.
- Trastornos del sueño.
- Osteoartritis.
Además, la obesidad puede ocasionar depresión, baja autoestima, discapacidades y aislamiento social.