Se refieren a diminutos parásitos que viven y ponen liendres o huevecillos en la ropa y piel porque necesitan alimentarse de sangre humana para sobrevivir, los cuales pueden transmitir ciertas patologías como tifus, fiebre de las trincheras y fiebre recurrente.
Los piojos del cuerpo son uno de los tres tipos que se manifiestan en los seres humanos, los otros dos son los de la cabeza y los púbicos, suelen ser de mayor tamaño y sus picaduras son visibles en axilas, cuello, hombros, cintura, parte superior de los muslos e ingles.
Indigentes y personas desalojadas de su hogar por desastres naturales o guerras son las más propensas a contagiarse por el contacto directo con la ropa de personas infectadas, debido a las condiciones antihigiénicas y de hacinamiento a las que pueden estar expuestas.
Los piojos del cuerpo, por lo regular, mueren en un lapso de tres días a temperatura ambiente si se desprenden de la persona contagiada, pero pueden vivir en los pliegues de la ropa hasta por un mes.
Cabe aclarar que los gatos y perros no propagan los piojos del cuerpo, ni de la cabeza y pubis.
Las formas de contagio incluyen:
- Contacto con personas infectadas.
- Ropa de cama, como almohadas, sábanas y cobijas.
- Ropa de vestir.
- Toallas.
- Gorras.