Trasplante de riñón

Después de un trasplante de riñón, pueden surgir diversas complicaciones quirúrgicas y postoperatorias.

• Sangrado
  El sangrado es común y suele detectarse dentro de las primeras 12 a 24 horas, requiriendo atención quirúrgica si es necesario.
• Trombosis
  La trombosis vascular es una complicación rara pero grave que puede causar bloqueos en los vasos sanguíneos del riñón.
• Estenosis de la arteria renal
  La estenosis de la arteria renal es un estrechamiento del vaso sanguíneo principal que lleva sangre al riñón. Esto puede reducir el flujo sanguíneo, afectando la función renal y aumentando la presión arterial.
• Estenosis ureteral y goteo de orina
  Algunas veces el uréter, el tubo que lleva la orina desde el riñón hasta la vejiga, puede no sanar correctamente después de la cirugía de trasplante, lo que puede provocar estrechamientos u obstrucciones. Para prevenir esta complicación, se utiliza un catéter ureteral durante la cirugía para mantener la conexión mientras se cura. Si experimentas molestias al orinar o cambios repentinos en la sensación, debes comunicarte de inmediato con tu médico tratante.
• Linfocele
  Durante la cirugía, algunos vasos del sistema linfático pueden cortarse, lo que puede provocar la acumulación de líquido alrededor del nuevo riñón, conocida como linfocele. Esta complicación afecta aproximadamente al 10% de los pacientes, y en algunos casos puede requerir drenaje o reparación quirúrgica si obstruye el flujo sanguíneo o de orina.
• Retardo en la función del injerto
  La disfunción inicial del riñón trasplantado, que implica una reducción en la limpieza de la sangre y la producción de orina, es común después del trasplante, especialmente en los casos de trasplante de donante fallecido, donde hay un período prolongado de enfriamiento del riñón. Esta disfunción suele ser reversible y puede durar unas pocas horas o semanas, aunque algunos pacientes pueden requerir diálisis temporal durante este período.
• Fiebre
  Cuando se presenta después de un trasplante puede ser una infección específica de la cirugía o inicio del rechazo del órgano.

Es importante notificar al médico tratante si tienes temperatura mayor a 38.5°C. Asegúrate de tener un termómetro al momento de ser dado de alta del Centro Médico ABC y saber leerlo.

• Rechazo
  El rechazo después de un trasplante renal ocurre cuando el sistema inmunológico del receptor identifica al riñón trasplantado como un cuerpo extraño y lo ataca. Los síntomas comunes incluyen: fiebre, cambios en los niveles de urea y creatinina en la sangre, disminución del volumen de orina, hinchazón y aumento repentino de peso.
  El rechazo hiperagudo ocurre minutos después del trasplante y puede resultar en la pérdida del riñón, mientras que el agudo y crónico requieren tratamiento inmediato para evitar daños permanentes al órgano trasplantado. Es importante estar atento a estos síntomas y buscar atención médica si se presentan.

• Infecciones
  Después del trasplante, tu sistema inmunológico está debilitado, aumentando el riesgo de infecciones durante los primeros tres a seis meses, incluso cuando los niveles de medicamentos inmunosupresores son altos para prevenir el rechazo. Las infecciones más comunes son causadas por bacterias, hongos y virus. Las infecciones bacterianas suelen ocurrir tempranamente después de la cirugía y pueden requerir tratamiento con antibióticos.

Te invito a descargar nuestro manual de educación al paciente, donde encontrarás información detallada sobre los cuidados necesarios para mantener tu salud después de un trasplante renal.