Se trata de una infección dolorosa de la articulación del hombro que ocasiona la diseminación de bacterias a través de la sangre a otras partes del cuerpo como resultado de una lesión profunda, haciendo que los gérmenes ingresen rápida y directamente a la articulación.
La artritis séptica del hombro puede surgir gracias a infecciones bacterianas, virales o fúngicas. Por lo general, la infección bacteriana por Staphylococcus aureus es la causa más común.
Existen distintos tipos de artritis que pueden afectar al hombro:
- Artritis reumatoide.
- Artritis por desgarro del manguito rotador.
- Artritis postraumática.
- Necrosis avascular.
- Osteoartritis.
Es importante mencionar que el revestimiento de las articulaciones no tiene capacidad de protección de las infecciones, por lo que al ingresar las bacterias, virus u hongos, pueden disminuir el flujo sanguíneo dentro de la articulación, ocasionando daños en cartílagos y huesos.
Existen una serie de condiciones que pueden favorecer el desarrollo de la artritis séptica del hombro, entre ellas:
- Trastornos crónicos que afectan las articulaciones, como la artritis reumatoide y el lupus.
- Lesiones o cirugía anteriores en la articulación del hombro.
- Prótesis articulares.
- Piel que se agrieta o lastima con facilidad, así como infecciones de la dermis, tales como eccema y psoriasis.
- Sistema inmunológico deprimido, principalmente por la presencia de enfermedades preexistentes como diabetes, problemas hepáticos y renales, así como medicamentos recetados para tratar la artritis reumatoide.
- Golpes y lesiones en las articulaciones.