Se trata de un padecimiento oncológico que se origina en el intestino delgado, órgano encargado de la digestión y absorción de los nutrientes de la comida ingerida, así como de atacar a las bacterias y virus que se introducen al organismo por medio de la cavidad oral.
El origen del cáncer del intestino delgado se desconoce, pero se sabe que surge a raíz de una anomalía celular que hace que las células crezcan desordenadamente y se acumulen formando una tumoración, invadiendo los tejidos circundantes con la capacidad de expandirse a otras zonas del cuerpo a través de un proceso metastásico.
Existen una serie de riesgos potenciales para desarrollar cáncer del intestino delgado, entre ellos:
- Mutaciones genéticas hereditarias.
- Enfermedad de Crohn.
- Inflamación crónica del intestino.
- Enfermedad celíaca.
- Fármacos que debilitan el sistema inmunológico.
El cáncer de intestino delgado se clasifica en:
- Adenocarcinomas.
- Tumores neuroendócrinos.
- Linfomas.
- Sarcomas.