Una vez que el médico analice tu sintomatología e historial clínico, te realizará una revisión física en la que podrá comprobar la textura de la piel de tus manos y verificar si existen dedos retráctiles, cordones tisulares o nódulos.
Asimismo, te pedirá que coloques las palmas de tus manos sobre una superficie plana y que estires los dedos. En caso de que no puedas hacerlo, sería un claro indicativo de que padeces este trastorno.
Normalmente, no se requieren estudios para diagnosticar la contractura de Dupuytren.
El tratamiento a seguir dependerá del grado de avance de la enfermedad y la intensidad de la sintomatología; en casos leves, quizá no sea necesario el tratamiento, mientras que en situaciones de gravedad, se deben romper o separar los cordones que jalan los dedos hacia la palma a través de procedimientos como punción de ruptura o separación luego de recibir inyecciones de enzimas para suavizar el tejido, y cirugía para extirpar completamente el tejido afectado.
Posteriormente, te recomendarán fisioterapia para que recuperes el movimiento, la fuerza y la capacidad de tus dedos.
En el Centro de Ortopedia y Traumatología buscamos mejorar la vida de los pacientes restringidos o inmovilizados por trastornos o lesiones musculoesqueléticas. Nos especializamos en el cuidado del aparato locomotor mediante la integración de los últimos avances médicos, biológicos y tecnológicos, en estricto apego a los más elevados estándares internacionales de atención al paciente.