Una vez que tu médico analice tu sintomatología e historial clínico, te realizará una revisión física para buscar signos del padecimiento. De encontrarlos, te solicitará:
- Análisis de sangre.
- Radiografías de tórax.
- Electromiografía para medir la actividad eléctrica del músculo.
- Electrocardiograma.
- Resonancia magnética.
- Biopsia cutánea y muscular.
- Prueba de fisiología pulmonar.
- Estudios de deglución.
Al ser un trastorno incurable, el tratamiento se enfocará en el control de los síntomas, ayudando a minimizar las erupciones cutáneas y a la recuperación, en la medida de lo posible, del tono y fuerza muscular.
Para ello, te prescribirán fármacos como corticosteroides y medicamentos que inhiben el sistema inmunológico, principalmente.
Asimismo, te recomendará que no te expongas a la luz solar, y si lo haces, deberás utilizar protector solar.
En caso de afectaciones severas, podrás recibir inyecciones de inmunoglobulina o someterte a procedimientos quirúrgicos para extirpar los depósitos de calcio que suelen ser muy dolorosos.
Por último, si los daños provocados por la enfermedad son importantes, deberás ir a sesiones de terapia física, del lenguaje y a recibir asesoría nutricional.
En el Departamento de Medicina Interna del Centro Médico ABC te brindamos servicios de atención médica con la más alta calidad y seguridad, desde la prevención, diagnóstico, tratamiento oportuno y seguimiento de patologías infecciosas, respiratorias, endocrinológicas, dermatológicas, reumáticas, nefrológicas, gastrointestinales, y hematológicas, tanto de padecimientos crónico-degenerativos como de cuadros agudos, mediante un modelo integral y multidisciplinario.