A través de la sintomatología, tu médico regularmente puede diagnosticar la deshidratación, ya que presentarás hipotensión arterial, ritmo cardiaco rápido, y problemas circulatorios en las piernas.
Como procedimientos confirmativos del diagnóstico puede solicitarte análisis de sangre y de orina.
El plan de tratamiento óptimo para revertir la deshidratación es la reposición de fluidos y electrolitos, aunque la técnica de reposicion puede variar dependiendo del grado de deshidrtación, los síntomas, las causas y la edad del paciente.
Cuando se trata de bebés y niños, se recomienda la ingesta de suero oral para reponer líquidos y electrolitos, mientras que en los adultos, beber abundante agua suele ser suficiente.
Sin embargo, en deshidrataciones graves, resulta indispensable acudir al área de Urgencias del Centro Médico ABC para recibir atención médica inmediata y prevenir posibles complicaciones severas que pueden poner en riesgo tu vida y la de tu hijo.