El dolor de cabeza por frío, cefalea inducida por frío o neuralgia del ganglio esfenopalatino, como también se le conoce, es una afección que se caracteriza por un dolor súbito y punzante en la cabeza que se irradia hacia el entrecejo, la frente, las sienes y en ocasiones, hasta el interior de la nariz, después de ingerir bebidas o alimentos fríos o congelados, tales como hielos y helados.
El dolor de cabeza por frío, coloquialmente conocida como brain freeze o frío cerebral, no se considera una patología como tal, pero sí forma parte de la “Clasificación Internacional del Dolor de Cabeza” y ha sido material de estudio para muchos investigadores que buscan comprender esta condición que afecta a un número considerable de personas, particularmente cuando se ingiere un alimento frío de manera rápida.
Cabe señalar que el ganglio esfenopalatino es el responsable de transmitir sensaciones desde la parte superior de la boca hasta la cabeza.
De acuerdo con investigaciones recientes, los dolores de cabeza por frío pueden manifestarse en cualquier momento y a cualquier edad, ya sea degustando un helado o bebida muy fría o congelada.
Esta neuralgia afecta a casi una tercera parte de la población y es más común en personas que padecen migrañas.
Los dolores de cabeza por estímulos fríos se producen por una constricción acelerada de los vasos sanguíneos que irradian el paladar al exponerlo a un material congelado o muy frío, después de la vasodilatación que se produce cuando inmediatamente se envía sangre caliente hacia el cerebro.
Cuando nuestro cuerpo detecta el frío, puede reaccionar emitiendo como antídoto una cantidad considerable de sangre caliente hacia el cerebro. Y este cambio en el flujo sanguíneo puede ser el responsable de este dolor de cabeza por frío.