Además de analizar la sintomatología e historial clínico, el pediatra realizará una revisión física que le permita al pediatra corroborar el diagnóstico.
Asimismo, podrá realizarle pruebas a tu hijo, tales como:
- Radiografías.
- Resonancia magnética.
- Tomografía computarizada.
Si la fractura es menor, es decir, que los fragmentos fracturados del hueso no se desplazan significativamente, se suele inmovilizar con yeso o una férula.
En casos más graves, se requerirá un procedimiento quirúrgico, con la respectiva inmovilización de la extremidad con la colocación de un yeso, después de la cirugía.
Una vez que el hueso se consolide, el médico pediatra establecerá un programa de actividad física para que tu hijo adquiera fuerza y movilidad en la zona afectada.
Debido a que resulta difícil valorar si el cartílago de crecimiento sufrió daño permanente, es posible que el médico solicite radiografías continuas después de la fractura para garantizar que el cartílago de crecimiento se esté desarrollando adecuadamente.
En el Centro de Pediatría brindamos cuidado especializado a los pequeños pacientes desde el momento de su nacimiento hasta que se convierten en adultos, a través de nuestros servicios de atención pediátrica, oncología, neurología y cardiología al nivel de los mejores centros médicos del mundo.