El médico ortopedista, después de analizar tus síntomas e historia clínico, te hará una revisión física para observar las fosas nasales y detectar signos de huesos rotos. Si lo considera necesario, solicitará radiografías y una tomografía computarizada para valorar la lesión de la nariz.
El tratamiento dependerá de la gravedad de la lesión, por lo que si tienes una fractura menor que no haya torcido o deformado tu nariz, puedes requerir:
- Analgésicos.
- Antibióticos.
- Compresas frías en la zona afectada.
- Férula para inmovilizar la articulación en la posición adecuada.
- Realineación manual de los huesos y el cartílago rotos.
Si se trata de una fractura grave que comprometió el tabique nasal y ocasiona dificultad para respirar, es probable que requieras una cirugía, la cual es fundamental hacerla entre las dos y tres semanas posteriores al traumatismo para evitar que se forme el callo óseo.
En el Centro de Ortopedia y Traumatología buscamos mejorar la vida de los pacientes restringidos o inmovilizados por trastornos o lesiones musculoesqueléticas. Nos especializamos en el cuidado del aparato locomotor mediante la integración de los últimos avances médicos, biológicos y tecnológicos, en estricto apego a los más elevados estándares internacionales de atención al paciente.