Una vez que tu médico analice tu sintomatología e historial clínico, te realizará una revisión física y neurológica, además de solicitarte estudios de sangre, tomografía computarizada, resonancia magnética, exámenes de la vista, audición y equilibrio, así como pruebas genéticas para ayudar a identificar el tipo de neurofibromatosis que padeces.
El tratamiento se enfoca en controlar los síntomas según el caso específico de cada paciente, por lo que se puede recurrir a distintos procedimientos y terapias, que incluyen medicamentos, cirugía para la extracción de tumores, radiocirugía estereotáctica, implantes auditivos de cóclea y de tronco encefálico, así como radioterapia y quimioterapia, entre otros.
En el Centro Neurológico, un grupo de médicos altamente capacitados y certificados en las diversas especialidades neurológicas están preparados para atenderte con la calidad y calidez que nos caracteriza.