Una vez que el médico analice el historial familiar, le hará una revisión física al menor, solicitará radiografías y mediciones de la pared torácica.
Una vez que se confirme el diagnóstico, según la gravedad del mismo y el estado de salud general de tu hijo, se determinará el tratamiento a seguir.
Si la anomalía es leve y los huesos aún están blandos:
- Se utilizará un dispositivo de compresión especial (corsé), que se ajusta alrededor del pecho, aplicando una suave presión para modificar la forma de éste con el paso del tiempo.
Cuando la deformidad es más extrema, la recomendación es:
- Una intervención quirúrgica, conocida como técnica de Ravitch, en la que se abre la pared torácica y se extraen fragmentos de cartílago de las costillas y se aplana el esternón.
Este tipo de cirugía suele emplearse con deformidades asimétricas graves de la pared torácica, en las que un lado sobresale y el otro está hundido. La cirugía puede ser de varias horas y requiere hospitalización.
En el Centro de Pediatría brindamos cuidado especializado a los pequeños pacientes desde el momento de su nacimiento hasta que se convierten en adultos, a través de nuestros servicios de atención pediátrica, oncología, neurología y cardiología al nivel de los mejores centros médicos del mundo.