Se trata de una masa o bulto de tejido anormal y blando que se desarrolla en los nervios periféricos, que son los encargados de regular los músculos que permiten distintas funciones en el organismo como caminar, parpadear y tragar, entre otras.
El tumor benigno de los nervios periféricos puede gestarse en cualquier parte del cuerpo. A pesar de que no es canceroso, sí puede dañar el nervio periférico y ocasionar la pérdida de la función en el área afectada.
Se desconoce la causa de la formación de un tumor benigno de los nervios periféricos, pero todo indica que puede estar relacionado a la alteración genética o a síndromes hereditarios como neurofibromatosis tipo 1 y tipo 2, y schwannomatosis. Las personas que reciben o recibieron tratamientos de radioterapia contra el cáncer tienen una mayor predisposición a desarrollar un tumor de los nervios periféricos.
Existen diversos tipos de tumoraciones, siendo las más frecuentes:
- Schwannoma.
- Neurofibroma.
- Perineuroma.
- Lipoma.