Una vez que tu médico analice tu sintomatología e historial clínico, te realizará una revisión física en la pondrá especial énfasis en el área escrotal, en la que:
- Verificará si tu escroto está inflamado.
- Medirá la sensibilidad del mismo.
- Determinará si tienes alguna hernia inguinal presionando el escroto y el abdomen.
- Hará un procedimiento de transiluminación, aplicando una luz en el escroto para observar la presencia de líquido alrededor del testículo.
Asimismo, te solicitará estudios como:
- Pruebas de sangre y orina para identificar algún proceso infeccioso.
- Ecografía.
- Resonancia magnética.
El hidrocele que afecta a los bebés normalmente no requiere tratamiento porque se cura de manera natural, pero en niños, adolescentes y adultos, se necesita una evaluación médica precisa para detectar causas y tratarlas adecuadamente.
De igual forma, puede llegar a ser necesario practicar una hidrocelectomía, que es un procedimiento quirúrgico ambulatorio que consiste en la extracción del hidrocele a través de un pequeño corte en el escroto, dejando un catéter por varios días para drenar el liquido.
Si te sometes a esta cirugía es importante seguir monitoreando médicamente tu evolución, debido a que hay ocasiones en las que el hidrocele puede ser recurrente.
Cómo prevenir un hidrocele:
- Evitar golpes y lesiones testiculares.
- Usar ropa interior con buen ajuste y protecciones testiculares al realizar deportes de contacto o actividades de riesgo de traumatismos.
En el Departamento de Medicina Interna del Centro Médico ABC te brindamos servicios de atención médica con la más alta calidad y seguridad, desde la prevención, diagnóstico, tratamiento oportuno y seguimiento de patologías infecciosas, respiratorias, endocrinológicas, dermatológicas, reumáticas, nefrológicas, gastrointestinales, y hematológicas, tanto de padecimientos crónico-degenerativos como de cuadros agudos, mediante un modelo integral y multidisciplinario.