¿Qué es Lesión ligamento cruzado posterior?

Se trata de un daño en el ligamento cruzado posterior que provoca un desgarro o esguince en él, siendo que este ligamento es un franja de material tisular que se encuentra en el área central de la articulación de la rodilla y que conecta el fémur con la tibia.

La función primordial del ligamento cruzado posterior es darle estabilidad a la rodilla cuando esta se mueve al frente o hacia atrás.

La lesión del ligamento cruzado posterior puede generarse por:

• Golpearse la rodilla flexionada en un accidente automovilístico.
• Ir corriendo y detenerse de manera repentina con la rodilla flexionada.
• Extensión excesiva de la articulación de la rodilla.
• Practicar algún deporte de contacto en el que puedas recibir golpes en la rodilla flexionada, tales como futbol, baloncesto o futbol americano.
• Saltar y caer mal con la rodilla flexionada.
• Si existe una dislocación de la articulación de la rodilla.

La lesión del ligamento cruzado posterior no suele aparecer aisladamente, sino que se presenta junto con lesiones en los meniscos o en otros ligamentos de la rodilla, lo que complica más el cuadro y puede llegar a ralentizar la recuperación.

• Episodio de dolor de mediana intensidad al momento de la lesión.
• Entumecimiento y rigidez en la rodilla.
• Incapacidad de continuar con la actividad deportiva.
• Dolor intenso al soportar peso sobre la pierna afectada.
• Inflamación de la rodilla.
• Problemas de movimiento.
• Inestabilidad.
• Dificultades para caminar.

Uno de los riesgos de experimentar una lesión de ligamento cruzado posterior es desarrollar con el tiempo artritis u osteoartritis en la rodilla.

Después de que el ortopedista analice tus síntomas e historia clínica, te realizará un examen físico de la rodilla para detectar la inflamación y las áreas de dolor, así como verificar capacidad de movimiento y funcionalidad de la articulación.

También te solicitará estudios de imagen para confirmar el diagnóstico, como:

• Ecografía.
• Radiografías.
• Resonancia magnética.

El tratamiento se hará en función de la gravedad de la lesión, pero, por lo regular, consiste en:

• Reposo.
• Compresas frías.
• Analgésicos.
• Antiinflamatorios.
• Cirugía en casos graves.
• Terapia física y rehabilitación.

En el Centro de Ortopedia y Traumatología buscamos mejorar la vida de los pacientes restringidos o inmovilizados por trastornos o lesiones musculoesqueléticas. Nos especializamos en el cuidado del aparato locomotor mediante la integración de los últimos avances médicos, biológicos y tecnológicos, en estricto apego a los más elevados estándares internacionales de atención al paciente.

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