La taquicardia por reentrada del nodo auriculoventricular (TRNAV) es una de las formas más comunes de taquicardia supraventricular paroxística.
Sus síntomas suelen iniciar de manera súbita y el paciente puede experimentar palpitaciones rápidas y regulares que rondan entre los 150 y 250 latidos por minuto. Las palpitaciones pueden estar acompañadas de una sensación de opresión en el pecho, dificultad para respirar, mareo o sensación de debilidad general.
Con frecuencia estos episodios se presentan en personas jóvenes y sanas, pero es posible que puedan ocurrir en adultos mayores.
Más allá de las palpitaciones, algunas personas pueden experimentar ansiedad, sudoración y, en casos severos síncope, que es la pérdida breve del conocimiento, debido a esta disminución transitoria del gasto cardíaco.
Estos síntomas desaparecen normalmente con rapidez, al igual que su inicio, sobre todo si el episodio termina espontáneamente o con maniobras vagales como la maniobra de Valsalva.
Aunque la taquicardia por reentrada del nodo AV no suele ser una condición de peligro por sí misma, sí puede impactar en la calidad de vida del paciente y requiere evaluación médica para confirmar el diagnóstico.
Cómo diagnosticar taquicardia por reentrada del nodo AV
El diagnóstico de la taquicardia por reentrada del nodo AV se basa principalmente en el electrocardiograma (ECG), especialmente si se logra registrar al momento de un episodio.
En un ECG típico de la taquicardia por reentrada del nodo AV se observa una taquicardia regular con complejos QRS estrechos, esto significa que los ventrículos del corazón se contraen de manera rápida y eficiente; y frecuencia cardíaca elevada.
Es posible que el ECG basal pueda ser completamente normal, por lo que el monitoreo ambulatorio con Holter de 24 horas o registradores de eventos también se utilicen, si los episodios llegan a ser infrecuentes.
Para confirmar el diagnóstico, es posible que en algunos casos se recurra a un estudio electrofisiológico intracardíaco, procedimiento que permite inducir la taquicardia en un entorno controlado y mapear el circuito de reentrada en el nodo AV. Gracias a esta evaluación no solamente se confirma el diagnóstico del TRNAV, también permite planificar un tratamiento definitivo.