Es una patología mental que dificulta o impide relacionarse con los demás, responder apropiadamente a las señales sociales y que genera alteraciones en el comportamiento y pensamientos, así como en la apariencia.
El trastorno esquizotípico se caracteriza por breves episodios psicóticos de alucinaciones o delirios, a diferencia de la esquizofrenia, en donde estos son más intensos, duraderos y frecuentes. Además, la persona que lo padece suele estar consciente de la diferencia entre sus ideas distorsionadas y la realidad, lo cua no acontece en la esquizofrenia.
Se desconoce qué ocasiona el trastorno esquizotípico, pero los estudios clínicos señalan que puede deberse a factores genéticos, ambientales y psicológicos. El riesgo es mayor si existen antecedentes familiares de esquizofrenia u otra afección mental.