La colitis o síndrome del intestino irritable es una enfermedad digestiva que se caracteriza por la inflamación del revestimiento interno del colon; este padecimiento es un trastorno crónico, por lo cual no tiene cura, pero se puede llegar a controlar, señala el Dr. Esteban de Icaza del Río, especialista en gastroenterología y endoscopía del Centro Médico ABC.
Alrededor del 50% de los pacientes que viven con colitis, tienen una buena respuesta al tratamiento médico, debido a esto es importante prestar atención al estilo de vida, incluyendo los buenos hábitos como mantener una adecuada hidratación, realizar ejercicio que ayudará a estimular el movimiento del intestino grueso y delgado, controlar el estrés y el cumplimiento de horarios de sueño, entre otras cosas.
La Secretaría de Salud señala que entre 16 y 30% de la población mexicana padece síndrome de colon o intestino irritable, mejor conocido como colitis; afecta principalmente a mujeres menores de 45 años de edad y es causa de ausentismo laboral debido a que es altamente incapacitante.
Adicional a todo esto, y lo que más impacta en la colitis es la dieta de la persona. Lo que se come impacta directamente en los síntomas gastrointestinales, por ello, es necesario escoger una dieta que cuente con las características apropiadas para ayudar a combatir la colitis.
Existen tres tipos de dieta que se ha comprobado que tienen beneficios para las personas que viven con colitis.
Dieta FODMAP
Esta dieta busca combatir el consumo de carbohidratos y azúcares; los azúcares son aprovechados por las bacterias que se encuentran en el intestino, que fermentan y generan distensión, inflamación y molestias gastrointestinales.
FODMAP es una dieta baja en alimentos fermentables, por lo cual se restringen algunas frutas como la manzana, pera, sandía; así como algunos edulcorantes como las mieles que vienen de la fructosa del sorbitol o del manitol. Otros alimentos como los espárragos, la coliflor o la cebolla también se restringen.
Dieta libre de gluten
Esta variante de dieta busca eliminar alimentos ricos en trigo, centeno y cebada. El gluten es una proteína que se encuentra en estos alimentos y que puede llegar a inflamar el colon.
Dieta libre de lácteos
Los lácteos son alimentos de difícil digestión; limitar el consumo de leche, quesos, cremas y productos similares ayudará a mejorar el tracto digestivo de las personas.
Alimentos que sí se pueden comer
Ante las restricciones de este tipo de dietas, es frecuente que la persona se pregunte ¿qué se puede comer? Comenta el Dr. de Icaza. Para las personas que padecen de colitis, las dietas a base de proteínas son lo que mejor funcionan, el consumo de carne, pescado, pollo o huevos es un gran aliado, también frutas que tengan poca fermentación como el kiwi, la papaya, el plátano, las uvas; y en vegetales el apio, el tomate, las aceitunas o espinacas son algunos de los ejemplos que se pueden consumir.
Como complemento a las mejoras en la dieta de la persona, también es importante recibir atención médica, la cual se enfocará en atender el estreñimiento y la diarrea que la colitis provoca.
Acércate con un nutricionista para conocer las diferentes opciones de dieta si vives con colitis y con un médico gastroenterólogo para la atención de los síntomas y control de la colitis.
En el Centro de Nutrición y Obesidad del Centro Médico ABC te podemos dar atención especializada ¡Contáctanos!
Fuentes:
Dr. Esteban de Icaza del Río – Especialista en gastroenterología y endoscopía del Centro Médico ABC https://centromedicoabc.com/medico/esteban-de-icaza-del-rio/
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