El dolor muscular, que es mialgia, es una condición que puede afectar a cualquier grupo de músculos del cuerpo humano.
Dolor muscular
La mialgia o dolor muscular puede presentarse de manera localizada o generalizada y su intensidad varía desde un dolor leve y tolerable hasta molestias severas que limitan la movilidad y calidad de vida de la persona.
El origen de la mialgia puede ser debido a diversos factores como el sobreesfuerzo, traumatismos, infecciones virales, enfermedades inflamatorias o estrés crónico.
A diferencia de otros tipos de dolor como el dolor articular o el dolor óseo, el dolor muscular está estrictamente relacionado a las fibras musculares y los tejidos que las rodean.
Generalmente, este tipo de dolor suele ser temporal y resolverse con reposo y tratamiento básico, pero es posible que existan situaciones en las que la mialgia sea persistente o que sea resultado de una enfermedad subyacente.
Los dolores musculares son una sensación de malestar, tensión o dolor que ocurre en los músculos esqueléticos y puede ser causada por diversos factores como:
- Sobrecarga o uso excesivo: esta es la causa más común, suele ocurrir después de realizar actividades físicas intensas, sobre todo si los músculos no están acostumbrados a esa carga de trabajo.
- Lesiones musculares: golpes, distensiones o desgarros pueden provocar dolor en el tejido muscular y es común que se presente en el contexto de actividades deportivas o accidentes.
- Infecciones: algunas infecciones virales y bacterianas como la gripe o el COVID-19 pueden causar dolor muscular generalizado debido a la respuesta inmunológica del cuerpo.
- Enfermedades inflamatorias: condiciones como la polimialgia reumática, fibromialgia y la miositis se caracterizan por la inflamación de los músculos y los tejidos blandos.
- Estrés: el estrés crónico y la ansiedad pueden llevar a la tensión muscular prolongada, esto resulta en dolor y rigidez.
- Sustancias: algunos fármacos u otras sustancias tóxicas pueden causar dolor muscular como efecto secundario.
En la mialgia, el dolor puede ser agudo, es decir, puede durar unos pocos días y está relacionado con lesiones o actividades físicas recientes; pero también puede ser dolor crónico con duración de semanas o meses y suele estar vinculado a enfermedades inflamatorias, infecciones persistentes o trastornos del sistema nervioso.
Además, esta afectación puede ser de manera localizada en un músculo específico o presentarse de manera difusa, afectado a varios grupos musculares de manera simultánea.
Lesiones musculares
Las lesiones musculares son una causa frecuente de mialgia y se relacionan, en su mayoría a traumatismos, sobreesfuerzos o a la práctica de actividades físicas sin el calentamiento adecuado.
Entre las lesiones musculares más comunes que se asocian a la mialgia está la distensión muscular que ocurre cuando las fibras musculares se estiran más allá de su límite natural y provoca dolor inmediato, inflamación leve y limitación del movimiento.
Un desgarro muscular es una lesión severa en la que se rompen de manera parcial o completa las fibras musculares, aquí el dolor es agudo, hay hinchazón y, en ocasiones, puede haber hematomas visibles.
Los calambres musculares son contracciones involuntarias y dolorosas del músculo que pueden durar desde segundos hasta varios minutos.
Las contracturas musculares ocurren cuando un músculo permanece en un estado de contracción continua y es una condición que suele ser consecuencia de sobreesfuerzo, mala postura o tensión emocional prolongada.
Aunque la tendinitis afecta directamente a los tendones, estas son las estructuras que conectan los músculos con los huesos, por lo cual es posible que la tendinitis cause dolor muscular debido a la inflamación y tensión que genera en el área afectada.
La contusión muscular ocurre después de un golpe directo al músculo, lo que provoca daño a las fibras musculares y a los vasos sanguíneos.
Qué es mialgia y artralgia
Una condición que suele estar estrechamente relacionada son la mialgia y artralgia; por un lado, está el dolor muscular que es mialgia y, por el otro lado, está el dolor articular que es la artralgia. Estas condiciones, aunque son diferentes se relacionan debido a que comparten causas comunes y a menudo se presentan de manera simultánea.
Padecimientos como la artritis reumatoide, fibromialgia, infecciones sistémicas, trastornos metabólicos, desgaste o sobreuso son situaciones que pueden provocar ambas condiciones.
Esta condición, la mialgia, es común que se presente en el día a día debido a múltiples causas. Su manejo suele incluir reposo, fisioterapia, analgésicos y cambios en el estilo de vida, pero en casos donde el dolor persiste o está acompañado de otros síntomas, es fundamental buscar atención médica especializada.
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Fuentes:
MedlinePlus, Elsevier, Kern Pharma
