Conocer los síntomas de artritis psoriásica ayuda a identificar esta condición en sus primeras etapas, lo que es fundamental para prevenir daños articulares permanentes.
Artritis psoriásica
La artritis psoriásica es una enfermedad inflamatoria crónica que afecta tanto a las articulaciones como a la piel. Es un padecimiento que está relacionado de manera directa con la psoriasis, enfermedad cutánea caracterizada por placas rojas cubiertas de escamas plateadas. Se estima que entre el 20 al 30% de las personas con psoriasis, desarrollan también artritis psoriásica, aunque es posible que se presente esta condición también en personas que no tienen lesiones cutáneas evidentes.
La artritis psoriásica se manifiesta de diversas formas y puede aparecer en articulaciones de todos los tamaños, en la columna vertebral, en los tendones, los ligamentos o la piel.
Cómo saber si tengo artritis
Detectar los síntomas de artritis psoriásica es fundamental para prevenir daños permanentes, dentro de los signos más comunes están:
- Dolor y rigidez articular: es uno de los primeros signos en aparecer, el dolor en las articulaciones se puede acompañar de rigidez, especialmente en la mañana o tras periodos de inactividad. Con mayor frecuencia se presenta en las articulaciones de los pies, manos, rodillas, codos o en la columna.
- Inflamación articular: provoca hinchazón en las articulaciones, lo que puede hacerlas sensibles al tacto. Este síntoma puede presentarse en una sola articulación o en múltiples al mismo tiempo y de manera asimétrica.
- Dactilitis: condición que coloquialmente también se conoce como “dedos en salchicha”, ocurre cuando los dedos de las manos o pies se inflaman de manera uniforme, este es un signo característico de la artritis psoriásica y ayuda a diferenciarla de otras enfermedades reumáticas.
- Dolor en los tendones y entesitis: es la inflamación en los puntos donde los tendones y ligamentos se unen a los huesos, comúnmente afecta al talón, la planta del pie y las costillas.
- Alteraciones en las uñas: se perciben cambios en las uñas como depresiones, reparación del lecho ungueal o engrosamiento.
- Fatiga y malestar general: la inflamación sistémica puede causar fatiga extrema, fiebre leve y una sensación general de malestar.
- Dolor de espalda: la espondilitis, que es la afectación de la columna vertebral, provoca dolor y rigidez en la parte baja de la espalda, en el cuello y en las caderas.
El diagnóstico de la artritis psoriásica se basa en una combinación de antecedentes clínicos, exploración física, estudios de imagen y pruebas de laboratorio. El apoyo de rayos X y la resonancia magnética permite mostrar daños articulares característicos, mientras que los análisis de sangre permiten descartar otras condiciones de salud.
El historial de psoriasis es esencial para llegar a un diagnóstico temprano, vivir con psoriasis o presentar antecedentes familiares de esta enfermedad eleva, en gran medida, el riesgo de desarrollar artritis psoriásica.
Tratamiento para la artritis psoriásica
El tratamiento para la artritis psoriásica tiene como objetivo principal aliviar los síntomas, prevenir el daño articular y mejorar la calidad de vida de la persona.
Existen diversas opciones de tratamiento que incluyen:
- Medicamentos: se emplean fármacos antirreumáticos, antiinflamatorios, terapias biológicas o inhibidores de JAK.
- Terapias complementarias: se apoya en la fisioterapia para mejorar la movilidad, fortalecer los músculos y reducir la rigidez articular, así como en la terapia ocupacional que ayuda a los pacientes a adaptar sus actividades diarias y preservar la funcionalidad.
- Cambios en el estilo de vida: con frecuencia se requiere realizar cambios en el estilo de vida que incluya la práctica regular de ejercicio, seguir una dieta saludable y aprender a manejar el estrés.
- Tratamiento dermatológico: en los pacientes que presentan manifestaciones cutáneas severas, el médico dermatólogo puede indicar tratamientos tópicos, fototerapia y medicamentos sistémicos pueden ser necesarios para controlar la psoriasis.
- Cirugía: en los casos más graves o avanzados, donde las articulaciones están severamente dañadas, la cirugía ortopédica como reemplazo articular es una posible opción.
Identificar los síntomas de artritis psoriásica de manera temprana es una acción importante, ya que esto ayudará a recibir un tratamiento adecuado antes de que se produzcan secuelas de gravedad para la persona.
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Fuentes:
NIH, MedlinePlus, MSD Manuals
