Una vez que tu médico analice tus síntomas e historial clínico, te realizará una revisión física y, si lo considera necesario, solicitará análisis y pruebas diagnósticas prenatales a partir de la semana 32 del embarazo, como una ecografía y una prueba de reposo, para medir la frecuencia cardiaca del bebé en respuesta a sus propios movimientos, así como el tono muscular, la respiración y el volumen del líquido amniótico.
Una vez que se tengan estos resultados, tu médico valorará si tu bebé puede nacer por parto vaginal o por cesárea. Sin embargo, si padeces diabetes u obesidad, lo más recomendable es una cesárea programada.
Después del nacimiento, tu médico revisará a tu bebé para analizar si no hay lesiones corporales, glucosa en la sangre anormalmente baja, policitemia u otras afecciones.
Es posible que tu bebé padezca obesidad infantil y resistencia a la insulina, por lo que deberá someterse a exámenes médicos de manera regular.
En el Centro de Pediatría brindamos cuidado especializado a los pequeños pacientes desde el momento de su nacimiento hasta que se convierten en adultos, a través de nuestros servicios de atención pediátrica, oncología, neurología y cardiología al nivel de los mejores centros médicos del mundo.