Las crisis epilépticas son aquellos síntomas visibles que padecen las personas que viven con epilepsia. Estas se presentan ante la actividad eléctrica anormal que sucede en una zona o en todo el cerebro de la persona.
Aunque existen más de 30 tipos de crisis epilépticas, en términos generales, se llegan a dividir en dos categorías, las crisis epilépticas focales y las crisis epilépticas generalizadas.
¿Qué tipos de crisis epilépticas existen?
Para determinar el tipo de epilepsia es necesario conocer el origen de las alteraciones cerebrales que provocan las convulsiones, nombre con el que se les conoce a las actividades anormales de las neuronas y que generan los cambios en la persona con epilepsia.
Las convulsiones focales se originan en una sola parte del cerebro. También son conocidas como convulsiones localizadas y pueden presentarse con pérdida o no de la conciencia.
Otros síntomas que son frecuentes son la sensación de déjà vu, alteraciones en la vista, sabor, olfato, sonidos y sensaciones corporales, mirar fijamente a la nada o no responder con normalidad. Además, podrían presentarse espasmos corporales, principalmente en las extremidades.
Las convulsiones generalizadas se originan en todas las áreas del cerebro y tienen seis subtipos:
- Crisis de ausencia. Se caracteriza por mantener la mirada fija en un punto en particular y puede acompañarse de movimientos corporales sutiles como parpadeos o chasquidos de los labios.
- Crisis tónicas generalizadas. Causan rigidez muscular y pueden afectar el conocimiento.
- Crisis generalizadas atónicas. Conocidas también como convulsiones de caída, son aquellas que causan la pérdida del control muscular.
- Crisis generalizadas clónicas. Se asocia a movimientos espasmódicos o repetitivos en cuello, brazos y cara.
- Crisis mioclónicas. Se presenta con movimientos espasmódicos breves y repentinos.
- Crisis tónico-clónicas generalizadas. Estas crisis son del tipo más intenso y pueden resultar en la pérdida abrupta del conocimiento, espasmos y sacudidas corporales.
También existen las crisis epilépticas sintomáticas agudas o crisis no provocadas. Estas se presentan debido a una alteración asociada a una lesión cerebral. Que un paciente viva este tipo de crisis no lo cataloga como un paciente con epilepsia, aunque los síntomas sean casi iguales.
¿Cómo son las crisis epilépticas?
Las crisis epilépticas ocurren de manera inesperada y generalmente se presentan tras una alteración en la persona, desapareciendo a los pocos segundos.
Cada persona es diferente y las crisis epilépticas se pueden presentar de manera ocasional o recurrente y generalmente serán iguales en cada una de las ocasiones que sucedan.
Es necesario que una persona tenga por lo menos dos convulsiones no provocadas para tener un diagnóstico de epilepsia.
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Fuente:
Mayo Clinic
MedlinePlus
