Puntos claves:
- El uso del Intrabeam puede ser indicado en etapas tempranas, lo cual puede ayudar a conservar la mama y a tener menos efectos secundarios que la radioterapia externa.
- Este tratamiento puede evitar que las pacientes tengan que acudir hasta cinco semanas continuas a recibir radioterapia como ocurre en el tratamiento convencional.
Las opciones de tratamiento para cáncer de mama han buscado, en los últimos años, que se reemplacen los métodos quirúrgicos radicales por terapias menos invasivas que permitan conservar la mama y disminuir los efectos secundarios.
La radioterapia intraoperatoria con Intrabeam es un complemento en la cirugía que sustituye a la radioterapia externa convencional. Es una alternativa innovadora, segura y precisa que puede ser indicada en etapas tempranas, lo cual puede ayudar a conservar la mama y a tener menos efectos secundarios que la radioterapia externa.
Intrabeam se aplica inmediatamente después de extirpar el tumor por medio de una dosis única solo en el sitio quirúrgico del seno afectado, lo cual permite la esterilización de la ubicación del tumor, con el objetivo de evitar su reaparición y propagación a otros tejidos u órganos. Adicionalmente, se ha demostrado que mejora los resultados estéticos y las pacientes reportan menos eventos de dolor postoperatorio, comparado con otros tratamientos.
Una de las grandes ventajas de este tratamiento, es que puede llegar a evitar que la paciente tenga que acudir hasta cinco semanas continuas a recibir radioterapia, como ocurriría con un tratamiento convencional.
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