Se considera un paciente pediátrico desde el nacimiento hasta llegar a la mayoría de edad.
Durante este periodo de tiempo, el médico pediatra buscará el bienestar de salud que incluye las enfermedades, el crecimiento físico, el desarrollo mental y también el desarrollo psicológico.
Clasificación de pacientes pediátricos
Durante esta etapa de la vida, se formará una estrecha relación médico- paciente pediátrico, debido a la gran cantidad de tiempo que pasarán juntos incluyendo la atención a padecimientos particulares o únicamente por el monitoreo constante que se necesita, así como la aplicación de las vacunas.
Generalmente, el médico realiza una clasificación de pacientes pediátricos para lograr establecer las características individuales de cada uno.
Así, los recién nacidos tendrán sus propias necesidades y seguimientos particulares, mientras que un niño de 10 años o un adolescente actúan y reaccionan de una manera muy diferente.
Comúnmente, los pacientes pediátricos se dividen en varias categorías y en función a su edad, esto incluye:
- Prematuros que nacieron antes de la semana 37
- Neonato es aquel bebé durante su primer mes de vida
- Lactante hasta cumplir 12 meses de vida
- Niño pequeño se clasifica hasta los cuatro años de vida
- Niño mayor hasta los 10 años.
- Adolescente es a partir de los 10 años y hasta que el médico pediatra deje de revisarlo, dependiendo de la región en la que te encuentres, esto es hasta los 18 o 21 años o, incluso, algunos adolescentes a partir de los 15 años buscarán que un médico general los atienda.
¿Cómo es la relación del médico con el paciente pediátrico?
Especialmente los padres de familia que tienen a su primer hijo, pueden tener muchas dudas sobre la relación que el pediatra y el niño tendrán, ya que los acompañará y asesorará por casi 18 años.
Con el objetivo de lograr la mejor atención al paciente pediátrico, el pediatra y todo su equipo tratarán de mantener una buena relación no solamente con el niño, también con la familia para lograr llevar el chequeo de la mejor forma posible.
Dependiendo de la etapa en la que se encuentre el niño, el pediatra cambiará su forma de relacionarse, por ejemplo, con el recién nacido o el lactante, no puede tener una comunicación verbal directa y todo se realiza mediante diálogos con los padres y revisión con el hijo.
Mientras que con el adolescente, el médico debe ganarse su confianza en los años previos, y en algún momento, el mismo paciente podrá asumir decisiones relacionadas con su salud.
Cuidados de enfermería en el paciente pediátrico
Aunque el pediatra es la cabeza en la atención médica del niño o niña, en ocasiones, es necesario el apoyo del personal de enfermería pediátrica, quienes se encargan de llevar a cabo actividades especializadas de atención primaria y urgencias.
Los cuidados de enfermería en el paciente pediátrico incluyen:
- Curación de heridas.
- Cambio de vendajes.
- Toma de puntos en heridas sencillas.
- Control del equipo de soporte vital.
- Control en la temperatura corporal del paciente.
- Administración de medicamentos e inyecciones.
- Apoyo al pediatra durante las consultas y los exámenes.
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Fuente:
Brigham and Women’s Hospital
Unidadpediatriaavanzada.com
