La sepsis es una condición médica de gravedad, que es potencialmente mortal, que se desarrolla rápidamente debido a infecciones comunes, si estas no son tratadas a tiempo. A pesar de ser una condición muy conocida en entornos clínicos, fuera de estas muchas personas desconocen su gravedad y hasta existencia.
Qué es sepsis
La sepsis es una respuesta extrema del cuerpo a la presencia de una infección y ocurre cuando el sistema inmunológico desencadena una reacción inflamatoria generalizada, en lugar de combatir la infección de forma controlada, y comienza a dañar los propios tejidos y órganos de la persona. Esta situación puede resultar de manera rápida en fallos orgánicos múltiples y riesgo de muerte.
Es importante diferenciar sepsis de septicemia, que aunque son situaciones similares y se llegan a confundir, difieren en realidad. La septicemia es un término menos preciso que la sepsis, que se refería a la presencia de bacterias en la sangre junto con síntomas de gravedad, pero actualmente este término se ha dejado de utilizar.
En realidad, cualquier infección puede desencadenar sepsis, pero por lo general se relaciona más a infecciones pulmonares como la neumonía, infecciones en el tracto urinario, infecciones abdominales e infecciones cutáneas; pero es posible que surja a raíz de complicaciones en heridas quirúrgicas, quemaduras o por dispositivos invasivos como los catéteres.
Dentro de los síntomas de sepsis se puede incluir fiebre o hipotermia, frecuencia cardíaca elevada, respiración rápida, confusión, presión arterial baja, disminución de la cantidad de orina.
Por lo general, la sepsis es una condición que progresa de manera rápida, motivo por el cual su detección temprana y tratamiento inmediato son fundamentales para mejorar el pronóstico del paciente.
La Organización Mundial de la Salud estima que anualmente 11 millones de personas mueren a causa de la sepsis, lo que representa alrededor del 20% de las muertes globales.
También es posible que muchas personas que sobrevivan a la sepsis puedan presentar discapacidades físicas, cognitivas o psicológicas a largo plazo.
Choque séptico
Al momento de hablar del choque séptico o shock séptico, estamos hablando de la forma más grave de la sepsis y ocurre cuando la sepsis avanza hasta el punto en el que el cuerpo ya no puede mantener la presión arterial suficiente para garantizar el suministro de oxígeno en los órganos vitales.
El choque séptico se caracteriza por una vasodilatación extrema, daño en el endotelio vascular y una respuesta inflamatoria descontrolada. Todo esto, en conjunto, desencadena una caída severa de la presión arterial, hipoperfusión de órganos, alteraciones en la coagulación y acumulación de ácido láctico; todos son indicadores de un metabolismo anaerobio celular por la falta de oxígeno.
El tratamiento en el choque séptico requiere cuidados intensivos, con frecuencia en las Unidades de Cuidados Intensivos; se requiere antibióticos de amplio espectro, líquidos intravenosos en grandes volúmenes, fármacos vasopresores para elevar la presión arterial y, generalmente, soporte respiratorio y renal.
Ante la gravedad de esta condición, existen protocolos hospitalarios conocidos como “Código Sepsis” con el objetivo de acelerar la atención y reducir las muertes a causa de esto.
Sepsis neonatal
La sepsis neonatal es una forma de sepsis que afecta a los recién nacidos, sobre todo en las primeras semanas de vida y es una de las principales causas de mortalidad neonatal a nivel mundial.
Su detección puede ser especialmente difícil por la inespecificidad de los síntomas que presenta esta población.
La sepsis neonatal se suele dividir en dos tipos:
- Sepsis neonatal temprana: ocurre en las primeras 72 horas de vida y se suele relacionar con la transmisión de microorganismos de la madre al bebé durante el parto.
- Sepsis neonatal tardía: ocurre después de los primeros tres días de vida y suele ser adquirida en el hospital o por personas alrededor del bebé.
El manejo de la sepsis neonatal requiere hospitalización inmediata, realización de cultivos y administración de manera urgente de antibióticos.
La sepsis es una amenaza que puede surgir desde una simple infección y convertirse de manera rápida en una condición potencialmente letal. La medicina crítica es esencial para el diagnóstico precoz y el tratamiento inmediato son esenciales para disminuir el riesgo de secuelas o muerte que trae esta condición.
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Fuentes:
MedlinePlus, OMS, MSD Manuals
