Conocer los síntomas de infarto puede ser la diferencia entre que una persona reciba la atención adecuada y salga delante de esta condición o que llegue a tener secuelas que pueden ser de gravedad o hasta poner en riesgo su vida.
Un ataque cardíaco o un infarto de miocardio es el momento en el que el flujo de la sangre que transporta oxígeno al corazón se bloquea de una manera repentina y es una situación de extrema peligrosidad.
Causas de un infarto
Generalmente, los ataques al corazón se deben a la obstrucción que es resultado de una acumulación de sustancias en las arterias coronarias como grasa o colesterol.
Aunque además suelen tener su causa a partir de una combinación de factores de riesgo que incluye dietas altas en grasas saturadas, inactividad física, hipertensión arterial, diabetes, antecedentes familiares, hiperlipidemia, tabaquismo y consumo excesivo de alcohol.
Todo esto puede revisarse con un médico en el centro cardiovascular mediante estudios del corazón.
Los síntomas de un ataque al corazón pueden variar y ser distintos para cada persona, en especial si lo está teniendo un hombre o una mujer, pero existen algunos que se presentan con mayor frecuencia, como:
- Dolor de pecho (se siente como presión o directamente dolor).
- Dolor en alguna parte del cuerpo como los hombros, brazos, espalda, cuello, mandíbula o en los dientes.
- Falta de aire.
- Fatiga o cansancio.
- Indigestión o acidez estomacal.
- Mareos repentinos.
- Náusea.
- Sudor frío.
En las mujeres se puede presentar:
- Dolor punzante o breve en el cuello, brazo o espalda.
- Náuseas, vómito e indigestión.
Tratamientos para infarto agudo de miocardio
El infarto agudo al miocardio es la principal causa de muerte en hombres y mujeres a nivel mundial, debido a que es una situación tan delicada que una vez que la persona comience a tener síntomas es de vital importancia que sea llevado a un hospital o centro cardiovascular para su correcta atención.
Generalmente, en estos lugares antes de que se confirme el diagnóstico se puede administrar uno o varios de estos tratamientos:
- Oxígeno.
- Aspirina para evitar la formación de coágulos en la sangre.
- Nitroglicerina para disminuir el trabajo del corazón.
Una vez que se ha confirmado el ataque cardíaco, existen diferentes tratamientos que incluyen:
- Antiagregantes plaquetarios: impide que las plaquetas se peguen unas a otras y formen coágulos.
- Anticoagulantes: logra que la sangre sea menos espesa y previene la formación de más coágulos en las arterias.
- Betabloqueantes: ayuda a disminuir el trabajo del corazón y prevenir otros ataques en el futuro inmediato.
- Inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina: disminuye el esfuerzo del corazón y baja la presión arterial.
- Trombolíticos: permiten disolver coágulos que bloquean las arterias coronarias.
Cómo prevenir un infarto
Sin importar el riesgo en el que te encuentres para vivir un ataque al corazón, si modificas los factores de riesgo tus posibilidades de que esto pase comenzarán a disminuir.
Dentro de las maneras para prevenir esta situación se encuentra:
- Controla otras enfermedades con las que vives como diabetes o la presión arterial alta que es hipertensión.
- Controla tus niveles de estrés.
- De requerir otros medicamentos por cualquier otra condición, sigue las indicaciones de tus médicos.
- Logra y mantén un peso saludable con una dieta saludable.
- No fumes.
- Realiza ejercicio con regularidad.
En caso de percibir cualquier síntoma de infarto ya sea en tu persona, o en alguien a tu alrededor, busca atención médica de inmediato.
En el Centro Cardiovascular del Centro Médico ABC te podemos dar atención especializada ¡Contáctanos!
Fuentes:
NIH, MedlinePlus, Texas Heart