Se conoce como gastritis a la inflamación del revestimiento, también conocido como mucosa, del estómago.
Aunque la gastritis se puede presentar en personas de todas las edades, existen algunos factores de riesgo que aumentan la posibilidad de desarrollar esta enfermedad.
¿Cómo se siente una persona con gastritis?
Existen diferentes síntomas de gastritis que una persona puede presentar y su intensidad dependerá tanto de la gravedad de la afección como de su causa.
El malestar o dolor abdominal, es uno de los síntomas más frecuentes en aparecer, aunque puede ser desde un dolor leve hasta un dolor intenso, y de igual manera, puede presentarse de forma intermitente o constante, esto suele estar relacionado a la inflamación del estómago.
La sensación de náuseas, indigestión, vómito o acidez estomacal son otras situaciones que están relacionadas a la gastritis.
En algunos casos graves, se puede vomitar con sangre o que las heces también la presenten.
Hay que recordar que cada persona que vive con gastritis, tendrá sus propios síntomas, niveles de intensidad y características particulares, incluso, puede haber casos en los que una persona con gastritis no tenga síntomas perceptibles o que lleguen a afectar su día a día, pero a pesar de esto, es importante recibir atención médica especializada.
¿Por qué da gastritis?
Existen muchos factores que pueden causar gastritis, en algunas ocasiones es uno solo pero en otras, son múltiples. Dentro de los factores más frecuentes están:
- Infección bacteriana: la infección por la bacteria Helicobacter pylori es una de las causas más comunes de gastritis, la bacteria se puede transmitir por alimentos o agua contaminada.
- Medicamentos: el uso prolongado de algunos medicamentos puede irritar el interior del estómago.
- Consumo de alcohol y tabaco: estos dos productos irritan o debilitan la capa protectora del revestimiento del estómago.
- Estrés: el estrés prolongado o crónico, aumenta la producción de ácido estomacal, lo que puede contribuir a facilitar la aparición de gastritis.
- Trastornos autoinmunes: en ocasiones, el sistema inmunológico puede dañar el revestimiento del estómago.
- Otras infecciones: la presencia de algunas infecciones parasitarias, virales o fúngicas también pueden causar gastritis.
- Genética: existen personas que genéticamente presentan una predisposición a desarrollar gastritis, lo que facilita que los otros factores de riesgo sean más intensos.
Es importante mencionar que no todas las personas que tengan uno o varios de estos factores de riesgo van a desarrollar gastritis; y de igual manera, la gastritis puede ser una situación aguda que se resuelve por sí sola, o puede ser una situación crónica que requerirá atención médica.
¿Con qué se quita la gastritis?
Dependiendo de la o las causas que provocaron la gastritis, el gastroenterólogo determinará el tratamiento pertinente para cada paciente. Sin embargo, en términos generales, este tipo de tratamientos pueden ser:
- Reducir la producción de ácido: existen medicamentos para la gastritis destinados a reducir la producción de ácido estomacal, lo que puede aliviar los síntomas y ayudar a que el revestimiento del estómago se cure.
- Antibióticos: en caso de que la bacteria Helicobacter pylori sea la causante de la gastritis, será necesario el uso de un antibiótico para el estómago.
- Antiácidos: son una herramienta que ayuda a neutralizar el ácido estomacal.
- Protectores: existen protectores del revestimiento del estómago que ayudan a protegerlo, y esto ayuda a su curación.
- Cambios en la dieta: es recomendado disminuir o evitar los irritantes como el alcohol, alimentos ácidos, picantes o grasos, el café y cualquier otro producto que empeore los síntomas de la gastritis. También es recomendable ingerir una menor cantidad de comida, pero aumentar la frecuencia.
- Manejo del estrés: debido a que el estrés crónico favorece en gran medida el desarrollo de la gastritis, es recomendable aprender a manejarlo.
Es indispensable buscar atención con un médico gastroenterólogo para que realice los estudios y análisis pertinentes y detectar si se está desarrollando la gastritis, y en caso positivo, conocer su causa, antes de empezar cualquier tipo de tratamiento.
Algo a considerar es que los medicamentos para la colitis y gastritis pueden percibirse como similares, pero nunca se deben tomar indistintamente o uno para tratar lo otro, sin haber tenido una revisión médica de manera previa.
En el área de Medicina Interna del Centro Médico ABC te podemos dar atención especializada a tus problemas de gastritis ¡Contáctanos!
Fuente:
MSD Manuals, NIH, URMC